miércoles, 26 de noviembre de 2008
El pájaro
Música para esta entrada: bedshaped
El suicida estaba dudando. Ya tenía una pierna colgada del otro lado de la baranda del puente, cuando repentinamente apareció un pájaro que se posó muy cerca de él y que parecía observarlo. O al menos eso es lo que el suicida sintió. De un golpe la vida no fue tan hostil, y su pena se alejó. Se quedó un rato observando al pájaro y el pájaro a él, y por primera vez en años se sintió dichoso. Y sintió también ganas de mirar al sol con los ojos bien abiertos, sin miedo. Se preguntó qué estaba a punto de hacer y se bajó de la baranda, borracho de sol y de vida, enceguecido de felicidad. Tan enceguecido, que no vio el camión que venía raudo por el puente y lo arrolló.
Suerte que la muerte es cumplidora con quien la cita, aunque a veces no aparezca huesuda y de capa negra, sino con forma de pájaro.
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26 comentarios:
Puxa! e eu que ja estava me achando o proprio passaro na vida deste hombre!
que final,che!
“Pájaro o demonio, siempre profeta”, decía Poe.
Muy buen artículo, "guadañoso" le diría, muy buena música.
Saludos!!!
Me gustó el post.. Muy bueno tu blog, y la música que acompaña entona muy bien.. Saludos desde el mundo de los sueños
Seré yo, tal vez, porque cada vez que decido asomarme por aquí para ver lo que ha escrito, después de leer me queda una melancolía tremenda... Justo hace un tiempo (dos años, creo) escribí algo con una imagen parecida: la del suicida en la baranda... pero en aquel entonces no hubo pájaro, sólo el sol anaranjado a punto de dormir, una ciudad ruidosa y una serpiente de pavimento...
Creo que necesito unas vacaciones.
Saludos
¿era un alado cuervo???? quizá disfrazado de blanco...
Sintió la plenitud de la vida antes que se le apagara la luz...
hay personas que habitan en este mundo a oscuras todo su tiempo...
un beso
Bonito relato, es que éste era un pájaro de mal agüero.
Dentro de lo tétrico del tema, me he reido porque mira que arrollarle un camión... Besotes, M.
Otra trampa e tu post. Pájaro-muerte, pájaro-inexorable destino... y ese cegarse de sol para despanzurrarse al poner los pies en la tierra.
Un relato genial, Marcelo, te superas. Breve, redondo y cautivador.
Olé.
Un beso.
Soledad.
Estaba esperando por su alma, lejos de querer contagiarle vida...y si, cada uno mira y ve las cosas según más le convenga, él no tenía ganas de morirse, solo tenía ganas que alguien le de una señal que la vida merece la pena ser vivida, aún en la mayor de las miserias...y no me refiero a la material precisamente.Beso de buen día
hay que tener mucho cuidado con "la pelicula" que te montas en la cabeza porque el destino es un buen "director" y el univeso un magnifico "productor" ¡ellos siempre cumplen!
Muy buena la banda sonora
que bueno el post, me ha encantado, sin palabras...
besos,
Rachel
A veces los detalles pequeños, como la mirada del pájaro, hacen que todo, absolutamente todo, merezca la pena.
Abrazos amigo.
Hay que tener cuidado con lo que se desea porque a veces se puede cumplir..
Un saludo
Vaya,vaya,no hay que citarla si no se está seguro, el pobre se llenó de vida para perderla!!!! ,bueno pero según dicen por ahi si te suicidas tu alma sufrirá mucho, así al menos podrá pelear un buen lugar en el cielo...
Marce ví esa intimidación al costadito de tu blog,después de eso ni pienso copiarte nada,las leyes Argentinas se cumplen,jamás me pondría en contra de un sistema tan transparente,y además que Fritus y Rafa vengan a intimidarme,NOOOOOOO,podrían suceder cosas terribles,me convenciste nunca ni una vocal te voy a copiar!
Un abrazo amigo,que tengas buen día!
Sencillo y brutal. Me ha gustado mucho, felicidades.
Hola, Marcelo! Perfecto, tu post. Me ha gustado mucho.
Saludos!
Se me ocurre que fue como decimos aquí" Un pájaro de mala muerte" Porque las ruedas de un camión... uy.. uy...
Un beso ... de vida!
Cuando era chica tenía un libro de cuentos "infantiles"; en él había un cuento de un hombre que llamaba a la muerte todo el tiempo, porque su vida era muy desgraciada.
Una noche, la muerte fue a buscarlo. El hombre se arrepintió, pero ya sabemos cómo es la muerte: puntual, aunque siempre llegue temprano (paradojas de la muerte). Y se lo llevó.
Otro día te cuento el cuento de la camisa del hombre feliz.
Una tragedia como pocas. Hamlet, un poroto.
Che, pero en la foto de Los Soprano falta el más malo, que es el que se casa con Parvati!
Habrá que tener cuidado y no invocarla...
Besos.
¡Hola Marcelo! Nobleza obliga y he recorrido tu blog, tanto me gustó que ya lo agregué a mis sitios favoritos para no perderte en la maraña bloguera. Qué curioso que uno encuentre tantas coincidencias de gusto, de sensibilidad, con personas que no conocés. Me gustó tu post "Paris es un lugar imaginario", en realidad, para mí es un lugar real y maravilloso, al que desearía poder volver. Date una vueltita por el post que publiqué el 4 de junio de este año (la foto se titula "Primavera a la orilla del Sena", etiqueta "urbana") y es el recuerdo de un momento mágico que viví esa tarde allí. Te la dedico con cariño, junto con la frase que allí leerás, que tiene relación con tu comentario de Paris.
Pd: tal vez tengamos gustos afines porque vos sos un escorpiano, como mi hijo, y yo soy de piscis, signo afín, aunque uno no crea mucho en estas cosas...
Te seguiré visitando con enorme placer y gracias por tan lindos comentarios.
Impactante, bello y artístico texto. Las fotos están maravillosas.
Me impactó, ¡estos son los finales que me gustan!
¡Saludos!
¡Qué bueno! La verdad es que parecía que iba tener un final de los màs empalagoso y...¡zás!, tan inesperado que he tenido que conterme la risa porque, si me hacía la imagen mental, parecía de película cómica.
Besos.
Fue raro lo que pasó con esto, porque lo primero que se me ocurrió fue lo del suicida arrepentido que muere en un accidente, y aunque era macabro me hizo gracia. Pero luego apareció el pájaro, y luego las fotos y la música, y se puso menos gracioso. En cualquier caso, si les hizo gracia, o les pareció tétrico, o les dio melancolía, o les hizo pensar en cualquier cosa, o los sorprendió, o les pareció brutal, se los agradezco, porque quiere decir que no les fue indiferente.
Saludos y gracias!
Ese pajarraco era la parca disfrazada.
Al final el hombre consiguió lo que queria,aunque ya no lo quisiese,jajaja.
Besos
Lo primero que se me ocurrió fue: ¡yo también quería escribir un cuento de un suicida! Después pensé en Juan Salvador Gaviota. Esperaba el final moralista y me sorprendiste. Bien, Marce. Esos son los finales que me gustan.
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